Que difìcil debe haber sido para Skin Yard ser de los pioneros del movimiento grunge y ver como otros grupos tenían su oportunidad antes que ellos. 1991 fue clave para el grunge, salió el Nevermind, el Badmotorfingered y el Ten, y aunque este disco que no tuvo el impacto de los mencionados, es tan poderoso como cualquiera de ellos.

Skin Yard fue una banda cuyos integrantes fortalecieron el movimiento grunge, basta decir que Jack Endino (guitarrista de la banda) produjo el Bleach de Nirvana, el Screaming Life de Soundgarden, el Mientras el Resto Sigue de Guillotina; que Barret Martin antes de llegar a los Screaming Trees fue baterista de Skin Yard, o que Matt Cameron (ahora baterista de Pearl Jam) fue el primer baterista de la banda.

Creo que es nuestra labor dar honor a quién honor merece; los medios se centraron en engrandecer a algunos pocos y dejaron de lado a otros que fueron escenciales, no sólo como base para otros grupos sino que siguieron apoyando a bandas desde atrás, ahí está el ejemplo de Jack Endino que desde la trinchera de productor se dió a la tarea de dar oportunidad a bandas que no tienen oportunidad en disqueras grandes, y se fue a topar con Guillotina, cuya energía y congruencia es loable a pesar de no ser una banda popular en nuestro país.

Pachamama esucha: 1000 Smiling Knuckles, Living Pool, Material Freak.

Si te late escuha: Soundgarden, Tad, Mudhoney.


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1000 Smiling Knuckles (1991)
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